Ante la gran cantidad de videos y páginas web que hablan de inventos que proporcionan energía gratuita e ilimitada o «energía libre» y los comentarios que estamos recibiendo en nuestro blog sobre ellos, queremos aclarar nuestra postura al respecto.
Aunque no creemos que todo en la ciencia esté ya descubierto y estamos abiertos a investigaciones que pueda cambiar los paradigmas dominantes, todos los documentos que hemos visto hasta ahora de esas supuestas «energías libres» tienen un escasísimo rigor y ni explican ni demuestran que se esté extrayend «energía de la nada. Además, si estas «energías libres y gratuitas» existiesen, los principios básicos de la ciencia, en los cuales se basa la explotación de las energías fósiles y prácticamente toda nuestra tecnología, deberían incumplirse.
Algunos de los vídeos que circulan se puede asegurar que son fraudes muy burdos y han sido hechos con intención de engañar, como este (en el cual nos tomamos el trabajo de repetir el experimento)(1).
Sin embargo es imposible desenmascarar todos los supuestos inventos que hay en la red, ya que apenas ofrecen datos y se escudan en historias de conspiraciones para no dar información.
Creemos que este tipo de invenciones no sirven más que para infundir falsas esperanzas de encontrar soluciones mágicas y no tomar conciencia de los problemas reales ni aplicar soluciones que sí están ahora al alcance de nuestra mano.
Por ello no vamos a aprobar los comentarios sobre este tipo de inventos, aunque si alguien cree que posee algún aparato que realmente esté extrayendo energía gratuita, estamos abiertos a comprobar si realmente lo hace, siempre y cuando explique de dónde procede la energía, cómo la transforma y cuál es su rendimiento. Además debería presentar aparatos reales en exposición pública (no videos ni documentos) y el aparato debería ser capaz de realizar un trabajo considerable (moviendo objetos de varios kilos por tiempos del orden de horas).
Una entrevista a Margarita Mediavilla sobre este tema
(1) Gracias al blog de Antonio Turiel hemos descubierto este otro vídeo en el cual el autor del primero explica que éste es un fraude y cómo lo hizo para denunciar la poca crítica con la que la gente acepta estos experimentos sobre «energía libre». De todas formas, llama la atención que el vídeo fraudulento haya tenido miles de visitas, mientras el otro vídeo que revelaba el engaño apenas se haya difundido. Es curioso que la gente difunda cosas tan simples como esta sin molestarse siquiera de comprobarlo en casa.